Camembertino: el nuevo queso de Santa Rosa que invita a bajar un cambio
- Gisela Carpineta (@gcarpineta) y Pancho Barreiro (@pansso)
- hace 16 horas
- 3 Min. de lectura
Con cremosidad francesa y espíritu argentino, el nuevo queso de Santa Rosa busca conquistar rituales diarios sin protocolos. Te contamos de qué se trata.

Hay productos que llegan para resolver una necesidad, y otros que vienen a acompañar momentos. El nuevo “Camembertino” de Santa Rosa juega en esa segunda liga: un queso que parece pensado para esas tardes en las que uno arma una tabla sin demasiada planificación, pone música suave, destapa algo rico y deja que la conversación haga el resto.
Se trata de un “pelo blanco” con una interpretación nacional del clásico normando. Un queso de pasta blanda, corteza aterciopelada y una cremosidad que no pide explicación: se entiende cuando se prueba, sin vueltas.
Un estilo mundial para el paladar argentino
Los quesos con moho blanco suelen estar presentes en las mesas europeas como protagonistas silenciosos. Pan, una mermelada que suma un contraste dulce, algo para tomar y listo.
En Argentina, el Camembertino entra a escena con un espíritu parecido, pero sin protocolos. Funciona igual en una merienda tardía, en la previa de una cena entre amigos o en la clásica picada que acompaña una charla larga.
La diferencia con otros quesos con hongos es que este radica en su superficie, lo que le confiere un perfil de sabor y aroma inconfundible.

Según explica Philippe Dumain, la idea es simple: explorar. “En la degustación de quesos, la única regla es romper las reglas. Animamos a nuestros clientes a crear sus propias experiencias. Si bien en Europa se come con la corteza, en Argentina la invitación es a probar todas las variantes posibles y encontrar su forma favorita de disfrutar del Camembertino”, afirma el Cheesellier y Director de Calidad Internacional de Savencia Fromage & Dairy. Una lógica que le sienta bien a un país que suele adoptar tradiciones ajenas, pero siempre les da su sello particular.
Maridajes que acompañan el momento
Si uno quisiera respetar el espíritu del terroir normando, podría acompañarlo con sidra, Calvados o una ginebra que mantenga ese registro fresco y aromático. Pero la mesa argentina siempre permite más libertades: un toque de miel, chocolate amargo rallado, algunos frutos secos o simplemente una combinación con Reggianito y Provoleta en la tabla habitual.
Según afirman desde Santa Rosa, “la virtud del Camembertino está en su versatilidad”. Se adapta a un picnic urbano, a un encuentro improvisado o a esa noche en la que no hay ganas de cocinar, pero sí de comer algo rico.
Para guardarlo -en el caso de que sobre-, lo ideal es envolverlo en papel aluminio y mantenerlo en la heladera, para que conserve su carácter. Y un detalle no menor: es apto celíacos y cuenta con certificación Sin TACC.

100 años de Santa Rosa
Santa Rosa tiene más de 100 años dedicados exclusivamente al queso. Esa constancia se nota: cada variedad respeta tiempos, técnicas y una idea de estilo que se mantiene firme. Su porfolio incluye clásicos como el Provolone y el Reggianito, el Sardo, el Atuel, el Fontina, el Azul, la Provoleta parrillera, el Pategrás, la Fondue de queso y el innovador Pimienta Negra.
El Camembertino, más que un lanzamiento, es un recordatorio: el disfrute también se construye con gestos simples. Una novedad que invita a acompañar momentos de forma relajada y alineada con un hábito creciente: comer bien sin complicarse. No es un queso para ocasiones especiales; es un queso para ocasiones reales.







